A continuación encontrarás la información relacionada con la lección 2 del Curso Restaurando nuestro amor de la Fórmula del Perdón para Matrimonios Católicos.
Señor mío y Dios mío, que investigas los corazones y conoces las conciencias de los hombres: dame la gracia de examinar sinceramente mis pecados y de comprender su malicia. Haz que los confiese bien y me enmiende de ellos, para que merezca Tu perdón y Tu gracia en esta vida, y después la gloria eterna. Amén.
Esposos y esposas
1
¿Tratas la mayor parte del tiempo cariñosa y amablemente a tu pareja?
2
¿Le has maltratado física, psicológica y/o moralmente?
3
¿En el enojo le faltas al respeto, le insultas y/o le maldices?
4
¿Con desprecio utilizas o has empleado palabras soeces hacia tu pareja?
5
¿Tratan en común sus problemas, educación de los hijos, etc.?
6
¿Charlan con confianza y luchan juntos para llevar adelante su hogar y su relación de pareja?
7
¿Le quitas la libertad a tu pareja para sus cosas buenas y lícitas?
8
Si le tienes que corregir, ¿lo haces con cariño?
9
¿Aceptas con humildad y amor cuando te corrigen justamente?
10
¿Le has desautorizado delante de tus hijos?
11
¿Abandonas a tu pareja en sus asuntos sociales, familiares y laborales ?
12
¿Tienes celos infundados?
13
¿Le vigilas tanto que pareces un policía?
14
¿Le das continuamente disgustos sin motivo?
15
Si eres marido, ¿das a tu mujer lo suficiente para los gastos de la familia y de ella?
16
¿Malgastas el dinero en vanidades o vicios?
17
¿Esposo(a), por ingratitud y mal proceder, fundado en egoísmo, has dicho no quiero más esta unión?
18
¿Por despiste y/o descuido pones a tu pareja en peligro de infidelidad?
19
En el acto matrimonial, ¿te dejas llevar del egoísmo o el hedonismo?
20
¿Practicas el acto conyugal con verdadero amor?
21
¿Tienes la debida precaución para no escandalizar a los hijos en el acto conyugal?
22
¿Faltas a la fidelidad conyugal en obras o en deseos?
23
¿Has violado tu promesa, tu fidelidad buscando el placer en aquel o aquella que no es tu esposo(a)?
24
¿Esposo(a), haz obligado a tu pareja ha realizar actos impuros que albergaron tristeza en su corazón?
25
¿En los días de confusión y dolor buscas a tu pareja para decirle: “busco refugio solo en tus brazos y consuelo en tu corazón”? Y cuando tu pareja te ha buscado ha encontrado esa comprensión y ese refugio?
26
¿Tienes el debido cuidado de no involucrar a los hijos cuando tienen dificultades de pareja?
Padres
1
¿Educas convenientemente a tus hijos en religión y en buenas costumbres?
2
¿Los alimentas, vistes atiendes a su salud y desarrollo físico, e instruyes en religión y cultura?
3
¿Corriges con cólera o injustamente a tus hijos?
4
¿Los corriges y castigas según merece la falta?
5
¿Tratas cariñosamente a tus hijos?
6
¿Los has maldecido o deseado algún mal?
7
¿Los maltratas o tienes atemorizados?
8
¿Los tienes mimados y consentidos, y no sabes oponerte a sus caprichos?
9
¿Les ríes sus faltas y desvergüenzas?
10
¿Sabes imponer tu autoridad rectamente respetando su personalidad?
11
¿Los dejas andar ociosos y vagos?
12
¿Sabes encontrar el equilibrio entre el ejercicio de tu autoridad y el respeto a los gustos e ideas razonables de tus hijos?
13
¿Eres tolerante con sus pecados?
14
¿Les das buen ejemplo en palabras y obras?
15
¿Hablas delante de tus hijos de cosas que les pueden hacer daño espiritual?
16
¿Les das buenos consejos para que no peligre su fe y su moral?
17
¿Les evitas los peligros de pecar?
18
¿Vigilas sus diversiones, amistades, lecturas y programas de televisión?
19
¿Cuidas de que en tu casa no entren revistas que puedan hacer daño espiritual a tus hijos?
20
¿Permites que tus hijas lleven vestidos indecentes o se entreguen a diversiones peligrosas, como bailes deshonestos, novios para pasar el rato, etc.?
21
Si tienen novio formal, ¿tomas las debidas precauciones para que en todo se porten como Dios manda?
22
¿Ayudas a tus hijos para que logren un estado de vida acomodado a su condición?
23
¿Tienes preferencias injustificadas, o has perjudicado a tus hijos injustamente en la herencia que les corresponde?
24
¿Has violentado a tus hijos en la elección de estado o prohibido que se consagren a Dios?
25
¿Inculcas a tus hijos rectitud en el proceder, fidelidad al deber y espíritu de trabajo?
26
¿Tienes arreglado tu testamento de modo que si faltas inesperadamente no haya conflictos?
27
¿Te has asesorado por personas competentes y honestas para que tu testamento esté de acuerdo con tus principios cristianos, y su redacción no cause problemas y conflictos a tus herederos? (El testamento debe redactarse a tiempo, con plenitud de facultades. Por ejemplo, ya. Más vale antes que tarde)
Al responder en tu corazón a estas preguntas y al haber encontrado tu falta a mis mandamientos, te exhorto a arrepentirte ahora en verdad y confiésate ante uno de mis sacerdotes, para no permanecer en tu falta.
Ahora, al encontrar tu falta, tu dolor y tu pecado, contristad tu corazón y arrepiéntete en el dolor de tu ofensa a mí.
Pide perdón que escucho tu corazón y mi misericordia será derramada.
Di la oración que te enseñó Mi Hijo amado y después recitad la gloria a la Trinidad misma.